Cada uno de nosotros tiene una misión en la vida, que nos mueve a intentar alcanzar ciertos objetivos, metas, o sueños por hacer realidad. Esta misión muchas veces se nos presenta como un sueño, o simplemente una voz interior que nos indica que algo está mal.
Pero, para saber cuál es tu misión debes estar estrechamente relacionado con tu mundo interno, es decir, conectado con tu alma y saber escucharle. Ya que, este tipo de manifestaciones se da ante oportunidades que no puedes dejar pasar, momentos únicos que te llevan a pensar: ¿Este trabajo ya no es para mí?, ¿Por qué hago esto si no me gusta?, ¿Qué podría hacer para sentirme feliz?
Quizás todos alguna vez en nuestra vida hemos pasado por eso, la diferencia está entre quienes lo escuchan o lo ignoran. Escuchar esta voz es lo que hace que gente común consiga resultados extraordinarios, porque sabe que en su interior está el motor de arranque para el despegue, es ésa fortaleza innata que poco a poco van adquiriendo a través de las experiencias, lo que les va a acercar a sacar su potencial, para encontrar un sentido en aquello que se enfoquen. Con la ayuda de ésta pequeña voz, no sólo conseguirás lo que es razonable sino que llegarás hasta donde es imPOSIBLE…
Cuando estés en presencia de esta voz, sólo debes preguntarte:
¿Cómo es aquello que quiero?
¿Cómo me siento estando allí?
¿Cuáles son las consecuencias en mi vida de estar allí?
Para que puedas dar respuesta a éstas preguntas tienes que salir de tu mundo externo y tener momentos de introspección a solas y en silencio para descubrir dónde quieres ir de verdad… Cuando uno menos se lo espera, de la mente florece un pensamiento, una emoción, una vivencia que te hace entender y descubrir todo lo que antes estaba oculto de ti mismo.
El gran reto está en tener la disciplina para perseverar y tener paciencia en que aquello que quieras emprender es realmente el camino ideal para ti.
Entiende que el universo es infinito y abundante para todos, y es gracias a él que podemos alcanzar y lograr todo lo que queremos, soñamos y nos merecemos. Reconoce las respuestas en tu interior. Acepta lo que es diferente y entra en la aventura de tu gran evolución.
“Cuando te bañas, piensas en el desayuno. Cuando desayunas, piensas en el trabajo. En el trabajo, piensas en la salida. Saliendo, piensas en llegar a casa. Estando en casa, piensas en el día de mañana. Hoy no has estado en el presente. Hoy no has vivido el “ahora”. Te estás perdiendo la vida misma”-Eckhart Tolle
Aprende a estar más presente en tu vida, en tu presente, en tu ahora, en tus deseos en tus sueños, en tus anhelos… Olvida la necesidad de cambiar a otros, de esperar de otros ya que en ellos no se encuentra la felicidad, tu verdadera felicidad está en ti, en cada situación que creas para tu vida, en las oportunidades que te permites creer cada día.
Si quieres estar más presente en tu vida y lograr cada uno de tus sueños un cambio de actitud será suficiente.
Para lograr cambiar tu actitud de cada día y empezar a obtener resultados, empieza por lo siguiente:
Confía, apoya, se paciente, tolerante y ayuda a los demás.
Entiende que siempre hay una solución para todo si hay compromiso y se aprende a explorar en lugar de criticar.
Se abierto de mente para no tomarte cualquier comentario de manera personal por desagradable que parezca. Escucha los puntos de vista de los demás, sin connotación personal y te ayudará a abrir posibilidades, mirar con perspectiva para rectificar, mejorarte a ti mismo y crecer como persona.
Preocúpate por conocer a las personas, pasa tiempo con ellas para averiguar lo que necesitan, lo que les ilusiona, lo que les angustia y cómo interpretan el mundo.
Se coherente en lo que dices y haces ganando credibilidad en los demás. Cuando haces lo que dices la gente te seguirá y creerá en ti.
Si los pasos que das día a día son pequeños no es lo importante, lo verdaderamente esencial es que los des con la grandeza de tu espíritu.
Entiende que sólo tú puedes traer a tu vida los resultados que deseas.
An Medina
